Astican solicita autorización para triplicar su lámina de agua en el Puerto de Las Palmas

Astilleros Canarios SA (Astican), empresa que lidera el sector de las reparaciones navales en el Archipiélago, quiere convertir sus instalaciones del Puerto de La Luz en un «Centro de Industria Naval», con la finalidad ampliar el negocio con energías renovables y aumentar la capacidad de producción actual del astillero, según recoge el proyecto básico remitido a la Autoridad Portuaria de Las Palmas.

La entidad solicita una «modificación sustancial» de la concesión de dominio público portuario, que le fue concedida el 25 de junio de 1973 por orden ministerial para prestar servicios de reparación naval en el Puerto de Las Palmas.

Astican reclama, en concreto, incrementar la superficie concedida en 6.226,25 metros cuadrados de terrenos y en 25.031,33 metros cuadrados de lámina de agua, con el objetivo de «construir» un Centro de Industria Naval para «ampliar» la capacidad productiva, «alineada con la incorporación de energías renovables y mejora energética», recoge el anuncio de la solicitud, que fue publicado en el Boletín Oficial de la Provincia de Las Palmas.

Fase de alegaciones

El proyecto básico presentado por la compañía, que inicia su tramitación oficial en la Autoridad Portuaria de Las Palmas, se encuentra en fase de consultas y de alegaciones públicas durante los próximos 20 días.

Si la modificación sustancial de la concesión sale finalmente adelante, Astican pasará a ocupar una superficie total de 169.797,25 metros cuadrados de suelo, así como 41.342,24 metros cuadrados de lámina de agua. El aumento del espacio solicitado para acceder a los barcos que llegan al Puerto de Las Palmas es significativo, pues casi triplica la zona de agua asignada hasta el momento, que pasaría de 16.311 metros cuadrados a los 25.031 pedidos ahora para incrementar la producción del astillero.

A cambio de la inversión para construir el nuevo Centro de Industria Naval, Astican interesa una prórroga de la concesión de 25 años, según lo dispuesto en La Ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante.

El viejo dique seco

La empresa venía trabajando durante los últimos años en un proyecto parar crear el mayor dique seco de África Occidental, con la finalidad de reforzar el posicionamiento del Puerto de La Luz en el sector de las reparaciones navales. Esas instalaciones, que irían adosadas al muelle naciente del actual astillero, no salieron adelante por las complicaciones técnicas del proyecto, que planteaba una inversión de 25 millones y aumentar la varada de buques de hasta 320 metros de eslora. Aspiraban, entonces, a triplicar la capacidad del astillero.

Esa iniciativa del dique seco es sustituida por esta ampliación de las instalaciones solicitada a la Autoridad Portuaria, que persigue ganar más línea de atraque en las aguas interiores del Puerto al incrementar los muelles Naciente y Norte de la concesión. Astican fue el primer astillero español privatizado en 1989 por el Instituto Nacional de Industria (INE). Desde entonces la familia Suárez ha impulsado una transformación espectacular, pues ha pasado de los barcos de pesca a prestar servicios de reparación naval de cualquier tipo, incluidos plataformas y buques perforadores que vienen de EE.UU. y el norte de Europa para poner al día sus certificaciones y afrontar sus nuevos contratos para extraer gas o petróleo en aguas profundas.

Capacidad actual

El astillero dispone de siete calles de varada y 1.000 metros lineales de muelle, en los que atiende a unos 180 buques todos los años. Directa o indirectamente genera empleo diario para 1.500 trabajadores, con acuerdos con 60 proveedores locales para dar servicio a los barcos, que siempre buscan acortar los tiempos para volver al mar lo antes posible y rentabilizar la actividad.

En sus instalaciones, además de tener en exclusiva del taller de Kongsberg, destacan el Syncrolift, una especie de ascensor de 10.000 toneladas de capacidad que permite varar los buques en muy poco tiempo, así como un gran almacén y talleres propios para trabajar el acero y la pintura, entre otros elementos indispensables para la industria naval.- M. Reyes / LA PROVINCIA



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